Después de dos años muy difíciles, la cadena de la producción porcina comenzó el 2023 con números más alentadores. No obstante, desde el sector esperan que la dinámica positiva se mantenga para poder recuperarse.
En comunicación con Diario Campo, la Ing. Agr. Delia Núñez, gerente de la Asociación de Criadores de Cerdos del Paraguay (ACCP), recordó que muchas granjas, principalmente pequeñas, dejaron de operar durante los últimos dos años. Incluso, las más grandes tuvieron que contraer la producción y postergar el crecimiento que proyectaban.
Al referirse al primer bimestre del año, señaló que la situación mejoró, con ligeros incrementos en los precios que reciben los productores y la apertura del mercado taiwanés. “Se abrió el mercado de Taiwán, lo cual es positivo para nosotros. Hay demanda, hay interés, y el producto es muy bien aceptado. Con todo lo positivo que está pasando, vamos a levantarnos. Pero va a llevar su tiempo, porque financieramente el sector está muy golpeado, tanto los productores como la industria”, expresó.
Por otra parte, señaló que hay menos disponibilidad de cerdos, en comparación a otros años, por el cierre de granjas y la contracción de la producción que se observó en otras.
Punto de equilibrio
En lo que va del año, el precio del cerdo por kilo vivo registró tres subas seguidas. En febrero, pasó de USD 1,27 a USD 1,39, y luego se ubicó a USD 1,40. Ya al final de segundo mes del año volvió a aumentar, para situarse en USD 1,48.
Con respecto al valor de equilibrio para los productores, la gerente de la ACCP señaló que varía de acuerdo con el tipo de granja y el nivel de inversión de cada una. “Ahora, los productores nos dicen que están empatando. Por lo tanto, el punto de equilibrio sería entre USD 1,48 y USD 1,50 por kilo vivo. El precio sigue siendo inferior en relación a los otros países de la región, pero por lo menos ya da un respiro”, sostuvo,
Buscan la consolidación del mercado taiwanés
Otro de los desafíos del sector es la habilitación de más cortes para el mercado de Taiwán, para que las exportaciones sean convenientes para Paraguay, señaló. Entre enero y febrero, el país asiático fue el segundo destino, después de Uruguay. “La idea es que Taiwán vaya posicionándose”, manifestó.
Con respecto a Rusia, que por muchos años fue el principal comprador de la carne porcina paraguaya, mencionó que los aranceles que comenzó a aplicar hicieron que se resintieran las exportaciones locales, tanto las de productos porcinos como los de carne bovina. “La idea es tratar de volver a este mercado, siempre y cuando los números cierren”.