Estiman que el 2022 concluirá con un leve crecimiento económico, de 0,2 %. No obstante, para el próximo año se espera un avance de 4,5 %, incrementó que estará impulsado por la agricultura y la manufactura agropecuaria. Esto se destacó durante la Conferencia Paraguay – Evaluación 2022 y Perspectivas para 2023, desarrollado ayer en el Banco Central del Paraguay (BCP).
Durante su presentación, el Ministro de Hacienda, Oscar Llamosas, destacó que en este año la actividad económica mundial se vio afectada por la guerra entre Rusia y Ucrania. La situación internacional impactó con fuerza en los commodities y en las condiciones financieras internacionales.
En el caso de Paraguay, resaltó como un golpe adicional la fuerte sequía que impactó en el sector agrícola y generó perdidas importantes.
A principios del 2022 se esperaba un crecimiento económico de 4 %. Sin embargo, los efectos de la sequía más el contexto internacional cambiaron las expectativas y la estimación del crecimiento económico cayó a 0,2 % para este año.
Para el 2023, las perspectivas económicas son buenas. En este sentido, Llamosas afirmó que se estima un crecimiento de alrededor de 4,5 %. Esta proyección va en línea con algunas estimaciones de organismos internacionales que monitorean a Paraguay. “Fue un año complicado, pero hay perspectivas positivas para el próximo año”, agregó.
El presidente del BCP, José Cantero, explicó que las principales economías del mundo, como China, Europa y Estados Unidos están cada vez más lentas y con una proyección de crecimiento menor y con problemas estructurales. “Los golpes que recibieron las economías del mundo son considerables y estos choques van seguir. Entonces, hay que trabajar en volvernos más resilientes, reparar las cicatrices existentes y a partir de ahí ver cómo crecer y generar oportunidades para nuestro país”, dijo.
Manifestó que la tensión geopolítica y la desaceleración económica global genera una menor oferta de commodities, problemas de suministro y aumento de los precios internacionales.
A pesar de esta situación, señaló que la inflación en Paraguay converge con la meta del BCP, y que la proyección es compatible con las expectativas. Expresó que la inflación en 2022 cerrará en 8,6 % y que para el 2023 se espera que sea del 4,1 %.
Para el próximo año, el BCP espera un crecimiento del 4,5 % que estará impulsado principalmente por la recuperación de la agricultura y sus efectos indirectos sobre otros sectores de la economía.
Por último, el economista William Maloney, jefe de América Latina y el Caribe del Banco Mundial (BM), destacó la recuperación económica de la región, que vuelve gradualmente a los niveles de prepandemia. Subrayó que hubo avances y un crecimiento considerable.
