La falta de previsibilidad del precio del ganado es una de las principales preocupaciones que tienen en la actualidad los productores. Así afirmó el doctor Marcos Pereira, presidente del Consorcio de Ganaderos para Experimentación Agropecuaria (CEA).
Durante una entrevista para Diario Campo, el presidente del CEA fue consultado sobre las preocupaciones que tiene el sector ganadero. Al respecto, señaló que la falta de previsibilidad del precio del ganado es en la actualidad un factor que inquieta a los productores. “Vemos con mucho recelo el tema de los mercados que tenemos hoy”, manifestó.
Para graficar la situación, mencionó los inconvenientes que generó la suspensión del mercado ruso a una de las plantas frigoríficas más grandes que tiene el país. Si bien es carne industrial la que se envía a Rusia, y solo dos industrias estaban habilitadas para exportar a este destino, que en este momento es solo una, impacta en toda la cadena, y en los precios de todas las categorías de animales, señaló.
“Como productores no podemos entender cómo el inconveniente de un mercado que compra solo vacas afecta al precio del novillo, la vaquilla y al resto de las categorías que se están comercializando en otros mercados”, sostuvo.
Por lo tanto, es fundamental una conversación sincera entre todos los sectores, para entender cómo se maneja esta situación, dijo. En ese sentido, pidió transparencia en las gestiones, tanto en los frigoríficos, el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), y en las demás instituciones que componen la cadena de la carne. “Para poder trabajar con tranquilidad y buscar previsibilidad en base a lo que vamos a hacer, porque ya estamos en el último tercio del año, reestructurando un poco lo que será el 2023, pensando en las inversiones que habría que hacer en el campo”, señaló.
Precios
El presidente del CEA mencionó que el precio del novillo, antes de la suspensión a uno de los frigoríficos que exporta carne a Rusia, era de USD 3,80 por kilogramo, y que se acercaba a los USD 4 por kilogramo con las bonificaciones que tienen los animales terminados en confinamiento. “Después de la suspensión, directamente bajó a USD 3,50 por kilogramo. Tenemos un diferencial de 30 centavos de dólar por kilo, que realmente es una diferencia muy grande”, enfatizó.
Efecto de la sequía
Señaló que los tres años de sequía afectaron de manera considerable a las pasturas, y que la falta de agua eleva el nivel de dificultad para luchar contra las malezas. Por ende, la falta de previsibilidad de los precios es un inconveniente para establecer un presupuesto. “Sabemos que la actividad ganadera demanda muchísima mano de obra, y que depende mucho del precio del ganado para poder estipular las inversiones a futuro”, expresó.
