A través de un comunicado, la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) compartió su postura con respecto al Reglamento UE 2023-1115. Además, desde el gremio recordaron que el bloque europeo es un mercado de gran importancia para la cadena de la soja de Paraguay.
En primer lugar, desde la Cappro mencionan que el reglamento UE 2023-1115 rige para los 27 países que conforman el bloque europeo, y establece condiciones para ciertos productos que se quieran introducir y comercializar dentro de este mercado, entre ellos la soja, la carne vacuna y la madera. Esta legislación se comenzará a aplicar a partir del 1 de enero del 2025.
“Consideramos que el reglamento es claro, en que no es suficiente solo demostrar la libre deforestación, sino que además se deberá demostrar el cumplimiento de la legislación del país de producción”, reza parte del comunicado del gremio.
Con respecto al comercio, desde el gremio recuerdan que la UE es el principal comprador de harina de soja de Paraguay (cerca de 500 000 toneladas por año). Además, Argentina, que es el principal destino de la soja en estado natural, procesa los granos paraguayos con los argentinos y exportan los derivados a la Unión Europea.
Según la Cappro, las exportaciones de soja desde Paraguay a Argentina, más los envíos de harina de soja a la UE, generan más de USD 3 600 millones. “Esa es la cifra que representan las ventas directas e indirectas a la UE para Paraguay”, aseguran desde la Cappro.
Por todo lo mencionado, el gremio considera que la UE es un mercado importante para la cadena de la soja de Paraguay, no solo en términos de volumen, sino también por ser uno de los compradores más confiables y de referencia para abrir puertas de otros países.
