Una consideración con la que coinciden muchos actores de la cadena cárnica nacional es que la habilitación de Estados Unidos representa el pasaporte para la carne bovina paraguaya a otros mercados importantes. En ese sentido, recordaron que algunos procesos de apertura se encuentran muy avanzados, por lo que son optimistas de cara al próximo año.
Patricio Silveira, director de operaciones de Minerva Foods Paraguay, fue uno de los que manifestó que la apertura de Estados Unidos facilitará la apertura de otros destinos a la carne vacuna paraguaya. Además, explicó que los deberes para la habitación están hechos, por lo que el sector se encuentra a la espera de novedades. “Canadá, México, Japón y Corea del Sur son mercados que tendrían que venir detrás de estos logros, de esta habilitación”, expresó.
Con respecto a las expectativas de exportación de carne vacuna a EE.UU. por parte de Minerva Foods, recordó que la compañía cuenta con una oficina comercial en este país. Por lo tanto, desde que se habilitó el mercado para Paraguay empezaron a vender la proteína roja de origen paraguayo.
Además, adelantó que tienen previsto exportar desde Paraguay 15 contenedores antes del 31 de diciembre. Es decir, entre 375 y 420 toneladas, cuyo valor va de USD 4 000 a USD 4 500 por tonelada.
Por otra parte, Silveira señaló que la oferta de ganado se vio bastante resentida en algunos momentos del año, como consecuencia de la sequía que afectó a la ganadería. No obstante, la situación mejoró en los últimos meses, por lo que esperan cerrar el 2023 con más de 800 000 cabezas faenadas. Es decir, con un nivel de faena muy similar a los que se alcanzaron en el 2021 y el 2022.
