La Cámara de Diputados otorgó media sanción al proyecto de ley “Que prohíbe la producción, importación y comercialización de la carne cultivada en laboratorio, para consumo humano y en toda la cadena alimenticia”. Ahora, la propuesta legislativa va a la Cámara de Senadores para su segundo trámite constitucional.
Este proyecto fue presentado por el diputado Luís Federico Franco. De acuerdo a lo expuesto por el legislador, la intención es proteger a las personas en su alimentación. En ese sentido, considera que la creación artificial de carne en laboratorios a partir de células madre extraídas de músculos de animales, junto con otros elementos, como suero fetal bovino, mioglobina, vitaminas, aminoácidos, grasa y tejido conectivo, con alto nivel de componentes químicos, plantea inconvenientes para la salud.
Además, para solicitar el apoyo a la propuesta, Franco mencionó que la Organización Mundial para la Salud (OMS) y Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) no pudieron expedirse sobre la carne de laboratorio, ni a favor ni en contra.
Por su parte, la diputada Rocío Abed, sugirió algunos cambios. En especial, recomendó testar todas las nomenclaturas para la palabra “carne”. Al respecto, mencionó que esta denominación está prohibida para productos alimenticios que sean de origen vegetal o que contengan células de cultivo animal producidas de manera artificial en un laboratorio. “La palabra carne solo se refiere al producto de origen animal, que se ha obtenido a partir del faenamiento y sean aptos para el consumo humano”, agregó.
Apoyo a la producción ganadera
El diputado Eulalio Gomes señaló que la aprobación de este proyecto de ley representaría apoyar a 136 000 productores y a 1 200 000 personas que directa e indirectamente viven de la ganadería.
Otra de las voces en defensa de este proyecto fue la del diputado Guillermo Rodríguez, quien manifestó que la carne sintética tiene el sello y la marca de la agenda globalista 2030. “Siendo los pioneros a la hora de prohibir esto, de alguna manera tenemos la posibilidad de darle un portazo a la Agenda 2030”.
Entre los argumentos para rechazar la propuesta se puede mencionar el de la diputada Johanna Ortega. La legisladora señaló que no existen estudios suficientes que reflejan que la carne cultivada en laboratorio sea buena o mala para la salud humana. “Creo que este proyecto es un atentado contra la libertad de mercado y la ciencia, porque pretende, no solamente no permitir la elaboración y producción o la importación de la carne sintética, sino también prohibir la investigación científica sobre cualquier tema. Puede ser un retroceso”, sostuvo.
También buscan prohibir la instalación de laboratorios
Entre las modificaciones también se destaca la sugerida por la Comisión de Equidad Social y Género de la Cámara Baja. Desde esta comisión plantean la prohibición del montaje de laboratorios con fines de producción de los productos alimenticios basados en el cultivo de células, como también toda la importación de equipos utilizados en los mencionados laboratorios para los fines mencionados, a excepción de los utilizados para la investigación.
