En la zafriña 2022 de soja y maíz se registró un incremento importante en la superficie de siembra, con relación al año 2021. El aumento fue mayor en la soja, que volvió a alcanzar los niveles del año 2020. Estos datos fueron revelados por el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio).
La entrezafra 2022 de soja se produjo en una superficie de 459.339 hectáreas, 346.792 hectáreas más que en 2021, cuando el área destinada al cultivo llegó a 122.544 hectáreas.
Los departamentos con mayor superficie de siembra de soja zafriña fueron Alto Paraná, con el 47 %; Caaguazú, con el 17 % del área; y Canindeyú, con el 13 % del área sembrada. Itapúa se ubicó en el cuarto lugar, con el 10 % de la superficie total. En este departamento se registró una disminución significativa, teniendo en cuenta que en el 2021 tuvo la mayor superficie de siembra.
Por otra parte, San Pedro, a pesar de tener el 10 % de la superficie del cultivo, casi triplicó el área de siembra con relación al año pasado. Es decir, pasó de 6.664 hectáreas en el 2021 a 17.893 en el 2022.
El informe destaca, además, que el departamento de Caazapá pasó de 4.800 hectáreas en 2021 a 36.599 hectáreas en el 2022, lo que representa el 8 % de la superficie del cultivo.
Maíz de entre zafra
En lo que se refiere al maíz zafriña, el reporte de Inbio señala que la superficie destinada fue de 1.026.591 hectáreas. Esto significa unas 107.950 hectáreas más que en el año 2020, donde se registró una superficie de siembra de 918.641 hectáreas.
Los departamentos con más áreas de siembra fueron Alto Paraná, con el 35 %; Canindeyú, con el 17 %; y Caaguazú, con el 15 % de la superficie de siembra.
Por otro lado, en el departamento de San Pedro se registró un aumento importante, ya que triplicó su área destinada al maíz zafriña. Es decir, pasó de 37.810 hectáreas en 2021 a 103.311 en el 2022. Otro de los departamentos que se destacó en cuando crecimiento de la superficie de siembra fue Amambay que, de las 10.130 hectáreas en 2021, alcanzó unas 32.055 hectáreas este año.
Agricultores apostaron a la entrezafra
Es oportuno recordar que, en el año 2021 el cultivo de maíz zafriña sufrió un marcado descenso de la superficie de siembra, por el retraso de las lluvias para el arranque de la zafra. Esta situación provocó que la siembra se realice más tarde y, en algunos casos, muchos productores incluso dejaron de sembrar.
En la zafra 2021/2022, la sequía fue la constante y arrojó un promedio de cosecha muy bajo, que generó fuertes pérdidas. La necesidad de recuperación impulsó a los agricultores a apostar a la producción de soja y maíz en la entrezafra; pero principalmente en el cultivo de soja. Por ello, en casi todos los departamentos se observa un crecimiento del área de siembra, con relación al año pasado.
