En los últimos años, el sector de la producción láctea superó muchos desafíos, como la pandemia y la fuerte sequía que afectó en algunas zonas del país. Actualmente, una de las principales apuestas de esta cadena es la apertura de más mercados a nivel internacional.
Tanto en la importación como la exportación de lácteos no se registraron cambios importantes en los últimos años. Una década atrás, para cubrir la demanda local necesariamente se debía adquirir lácteos de otros países. “Hoy ya tenemos la capacidad de satisfacer la demanda nacional, capacidad que vamos sosteniendo año a año”, aseguró la licenciada Lourdes Torres, gerente general de la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos (Capainlac).
Sin embargo, la producción de leche muestra un crecimiento mucho más rápido que el del consumo interno. Por ello, se necesita la apertura de mercados para colocar los excedentes. “No obstante, el objetivo de la Capainlac es cubrir la demanda nacional. Ese es nuestro primer objetivo, y después mirar la exportación”, aclaró.
Asimismo, señaló que el crecimiento del sector dependerá mucho de la apertura de más mercados, porque la capacidad de producción es muy grande a nivel país y el consumo interno no acompaña. Por lo tanto, es necesario tener la posibilidad de exportar esos saldos.
Estatus sanitario
Igualmente, la gerente de la cámara señaló que uno de los principales desafíos que tiene el sector, especialmente del primario, es trabajar en los programas sanitarios. “Se está trabajando en un camino lento, seguro y necesario para nosotros”, afirmó.
Estos trabajos se desarrollan con el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa). Actualmente está vigente el Programa de Brucelosis. “Una vez que tengamos el estatus sanitario más elevado, vamos a poder abrir mercados más exigentes, que es lo que tanto estamos buscando”, aseguró.
Consumo de leche en Paraguay
Según datos compartidos por la Capainlac, en el 2022 el consumo de leche per cápita fue de 135 litros; en el 2021 fue de 130 litros; 135 litros en el 2020; 129 litros en el 2019; 127 litros en el 2018; 126 litros en el 2017; 120 litros en el 2016; y 118 litros en el 2015.
Si bien se logro incrementar el consumo en los últimos años, la cantidad todavía se encuentra lejos de los 180 litros per cápita por año que recomienda la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.