La agricultura se encuentra en un momento de cambios, con la incorporación de varios elementos y grandes desafíos a nivel global. En ese sentido, las innovaciones que llegan para facilitar el trabajo requieren la atención adecuada para que Paraguay conserve, e incluso mejore, su posición privilegiada como productor de alimentos.
Juan Cruz Jaime, director ejecutivo para el Cono Sur de Crop Life Latinoamérica, señaló que es importante que en Paraguay se busque un marco regulatorio adecuado para las nuevas tecnologías que traen innovación al sector agrícola. En concreto, se refirió a la inteligencia artificial, el uso de drones en las aplicaciones de plaguicidas, y productos biológicos. “Son todos elementos nuevos”, señaló durante el conversatorio organizado el martes pasado por la Cámara de Fitosanitarios y Fertilizantes (Cafyf) para celebrar sus 25 años.
Con respecto a las conversaciones sobre los marcos regulatorios a nivel local, destacó el diálogo franco y transparente que mantienen con representantes del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y de la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (Dinapi). “Tenemos muy buena recepción del poder público. Creemos que hay que fortalecer esos vínculos”, expresó.
Además, destacó la solidez del trabajo desarrollado por Cafyf en Paraguay, y el compromiso que tiene la cámara para lograr estos objetivos. “Tenemos el círculo virtuoso, entre asociación, empresas y Gobierno para llevar esto adelante”, dijo.
Por otra parte, señaló que Paraguay es un país que crece y se adapta a las nuevas tecnologías con la velocidad necesaria; Además, valoró el compromiso y la responsabilidad que tiene como proveedor de alimentos al resto del mundo.
Desafíos
El director de Crop Life Latinoamérica mencionó que esta industria invierte cerca de 8 billones de dólares anuales en investigación y desarrollo. “En los últimos 20 años prácticamente doblamos la inversión”, expresó para reflejar el compromiso que tiene este sector con la innovación.
Esta innovación se observa en diversas áreas; entre ellas, inoculantes para plantas, ARN, defensivos biológicos, tratamiento de semillas, e inteligencia artificial.
Con respecto a los desafíos que tienen las industrias que componen Crop Life, señaló que es esencial contar con una regulación sólida, sin incurrir en la sobrerregulación. “Es un desafío, porque muchas veces nos sobrerregulan por temor, no con base científica”, dijo.
La regulación en exceso, sin base científica, puede retrasar la incorporación de tecnologías, y dejar desfasado a un país en comparación a otros que sí aceptan la necesidad imperiosa de acelerar la adopción de una nueva herramienta.
Escenario internacional y el papel de Paraguay
Por el potencial que tiene como país agrícola, Paraguay puede estar a la vanguardia para afrontar una nueva situación a nivel global, señaló Cruz Jaime. En ese sentido, mencionó la guerra entre Ucrania y Rusia, que plantea un escenario incierto en el mercado mundial de alimentos; como también los desafíos ambientales planteados por la Unión Europea con iniciativas como el Green Deal y Farm to Fork (Pacto Verde y De la Granja a la Mesa).
El director de Crop Life Latinoamérica explicó que estas son dos políticas desarrolladas por la Unión Europea desde hace unos años, y que fueron reforzadas, ya que se plantean en mancomunidad con los Objetivos 2030 de Desarrollo Sustentable. Por otra parte, señaló que pueden transformarse en barreras paraarancelarias para las exportaciones de los países de la región, si estas iniciativas son mal manejadas.
Por lo tanto, mencionó la necesidad de un diálogo franco entre la Unión Europea y el Mercosur, donde el objetivo sea limar asperezas y buscar que estas iniciativas se conviertan en un marco estratégico en el que todos puedan trabajar por el bien común. “Mientras que la Unión Europea no sea clara y consistente en lo que realmente pretende hacia el 2030, nosotros estamos como en una nebulosa regulatoria que no permite desplegar todo el potencial del Cono Sur”, manifestó.
