Cubrir la inversión realizada en las parcelas agrícolas con una póliza de seguro es una práctica que todavía no está muy arraigada en Paraguay, en comparación a países como Argentina o Brasil, para no ir más lejos. Sin embargo, ante situaciones climáticas tan adversas, como las que afectaron la zafra sojera pasada, esta es una herramienta que puede dar un respiro a los productores.
El Ing. Agr. Fabián Pereira, director comercial del Grupo GPSA, contó a Diario Campo la experiencia de la empresa con los seguros agrícolas. Comenzaron a utilizar esta herramienta hace alrededor de tres años, cuando vieron la posibilidad de preservar los proyectos arroceros de la firma, cultivo que demanda una alta inversión por hectárea. “La inversión en arroz es bastante importante, de casi USD 1.200 por hectárea”, señaló.
Cuando se trata de cultivos de arroz, el tumbamiento es una de las principales situaciones que pueden arriesgar la producción. Por ello, en los últimos tres años la empresa tuvo una experiencia positiva con el uso del seguro agrícola para proteger el capital invertido en los campos. “El seguro agrícola nos permite tener asegurada la inversión cuando se dan tumbamientos”.
Zafra sojera 2021 – 2022
Si bien la inversión en soja por hectárea es menor que en arroz, el seguro agrícola permite no perder íntegramente la inversión que se realiza para implantar las parcelas.
Por lo mencionado antes, desde GPSA optaron por asegurar alrededor de 9.000 hectáreas en la zafra pasada, que es cerca del 30 % de todo lo que la empresa siembra en varios campos, ya sea directamente o que trabaja con sus clientes de forma tercerizada. “Le mostramos a ellos que había una posibilidad importante de una sequía, y la importancia de tener un seguro agrícola que pueda cubrir ese déficit, y que nos pueda proteger de ese riesgo climático”, explicó Fabián Pereira.
Con respecto a la inversión en el seguro agrícola, señaló que es cerca de USD 60 por hectárea, con lo que se cubre de USD 650 a USD 700 por hectárea. “En la última campaña, nosotros pudimos cubrir todo lo que sea insumos, y una parte del arrendamiento”, afirmó.
Por otra parte, mencionó que muchas veces se confunde el alcance de las pólizas. En ese sentido, aclaró que esta herramienta es para recuperar la inversión, es decir, el costo de insumos y de alquiler de la tierra. “Muchas veces se confunde y se pretende ganancias. Realmente, eso no está permitido dentro de los seguros, no te ofrece la posibilidad de cubrir una posible ganancia”.
Recordó que, en la zafra pasada, en algunas zonas productivas no superaron de 350 kilos de soja por hectárea, especialmente en San Pedro. “Entonces se activaron las pólizas, y el seguro nos pagó la diferencia. Lógicamente, no son los precios del momento, sino los que se tienen al cierre de la póliza”, explicó.
Cobertura de toda la superficie
Tras una experiencia satisfactoria en el uso de seguro agrícola, durante la zafra sojera 2021 – 2022, la intención del Grupo GPSA es trabajar en casi el total de la superficie con una cobertura que proteja ante un posible riesgo climático. “Vamos a trabajar sobre unas 30.000 a 35.000 hectáreas agrícolas, que van a estar protegidas con un seguro agrícola”.
