Tras las primeras cosechas de maíz, las expectativas del sector son elevadas. Se espera una colecta superior a cinco millones de toneladas, lo que dejaría un importante excedente para exportar.
Las primeras áreas cosechadas de maíz dieron muy buenos rendimientos, más allá del efecto de las heladas. Hugo Pastore, director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), señaló que la producción total debería superar cinco millones de toneladas. “Veremos si no podemos llegar un poquito más arriba, cerca de los seis millones de toneladas”, añadió.
A nivel interno se consume cerca de 2.500.000 toneladas a 3.000.000 toneladas de maíz. “Con ese volumen ya está suficientemente atendido”.
Con respecto al volumen exportado, mencionó que a Brasil se envían cerca de 1.500.000 toneladas por año. En este sentido, señaló que el trabajo a media máquina en la aduana del vecino país podría ser una limitante e impedir el correcto flujo hacia este mercado. “Si se da esta escala de producción que esperamos, también tendríamos volumen para exportar a otros mercados”, expresó.
Dificultades logísticas
Desde hace más de seis meses, la logística terrestre al mercado brasilero se encuentra afectada por la huelga en la Receita Federal de Brasil. Esto representa sobrecostos por la demora para pasar la frontera. Sin embargo, el problema principal es la ausencia de certidumbre para cumplir los contratos. “Es una constante negociación y estamos en permanente contacto con autoridades nuestras en la Cancillería y en la Embajada Brasilera en Paraguay”.
Hidrovía Paraná-Paraguay
Pastore comentó que los ríos recuperaron el nivel de agua. No obstante, señaló que en la actualidad ya no hay mucho que transportar, en especial por el río Paraná. Con respecto al río Paraguay, explicó que se encuentra por culminar la campaña de exportación de soja y sus derivados. En ese sentido, señaló que la merma de la zafra 2021-2022 afectó el volumen. “En general, las condiciones de hoy son un poco mejores; pero, creemos que a mediano y largo plazo volveríamos a tener aguas bajas porque las recargas de las reservas no fueron suficientes”.
